VIAJAR A NUEVA YORK
EN UN ABRIR Y CERRAR DE OJOS
Manhattan ofrece una versión fascinante y condensada de la Nueva York que se desea conocer; de hecho, los habitantes de Queens o de Brooklyn dicen que van para la city, cuando se dirigen a Manhattan, porque tiene esa mezcla de vida real que ofrecen sus apresurados ejecutivos y los show buildinqs que tanto buscan los turistas.
Para empezar el día, unos deliciosos bagels, esas deliciosas masitas que saben a lo que se les ponga y que son herencia de la gastronomía judía, la ciudad es famosa por ellas. La idea es comérselos a temperatura ambiente con mantequilla o queso crema. También se consume con tomate y lox (salmón curado). Ni Starbucks ni Dunkin' Donuts tienen los mejores.
Con tanta energía, el destino está marcado: aprovechar la mañana para visitar la c, por su belleza arquitectónica. Elegir entre una visita al Moma Qa entrada no tiene costo los viernes en la tarde) o al Metropolitan Museum of Art, que cuenta con una de las colecciones de arte egipcio más importantes del mundo.
A estas alturas, ya es medio día y el apetito acosa y, aunque no fuera así, Shake Shack, es un fenómeno urbano que no conoce la multitud turística y que merece ser visitado. Consiste en un kiosco ubicado en Madison Square Park, en la esquina de la calle 23 con Madison Ave. Sus hamburguesas son famosas entre los lugareños, aunque no tengan nada fuera de serie, ni siquiera el precio, USD6 aproximadamente. El encanto puede estar en el entorno y en las ardillas que esperan que caiga alguna miga de pan.
Para hacer la digestión, cómo no irse de compras o al menos admirar las lujosas tiendas, llevarse algo de Macy's y antes de que anochezca, formarse una idea total de Manhattan desde uno de los mejores observatorios de la ciudad, el Empire State. Tiene la mejor vista posible de downtown Manhattan y Financial District. Menos conocido por el gran público, Top of the Rock, en Rockefe-ller Center, permite reserva previa a través de Internet o comprar la boleta en las taquillas, donde fijan una hora para entrar sin filas. Tiene una vista impresionante.